The day before - Vol 2 - Neo2

THE DAY BEFORE: 36 HORAS DE MODA EN BLANCO
Nervios, prisas…últimos retoques, fittings a horas prohibitivas, anulaciones de prendas, montaje de la pasarela, invitados, invitaciones, luces, make up, pruebas de peluquería, modelos que no llegan o canceladas en el último minuto, aguja y dedal, nervios, muchos nervios, noches en vela, estrés 36 horas antes del desfile.
Esto es The day before. El objetivo de Loïc Prigent colándose justo en las horas previas al gran momento de todo diseñador, el show… la presentación a prensa, invitados, compradores, Vips… en definitiva a todo el mundillo de la farándula moda, la colección trabajada durante seis meses.
Tras el éxito del volumen 1, donde Prigent se coló en la trastienda del terrible Jean Paul Gaultier, la positiva Sonia Rykiel, el soberbio Lagerfeld para Fendi y los jóvenes y prometedores Proenza & Schouler -pieza más floja del pack-; Pringent vuelve a colarse y a poner de los nervios a unos cuantos diseñadores horas previas al gran momento. Si la primera selección mencionada tocaba más la línea de diseñadores franceses, el volumen dos cruza el charco colándose en el backstage de Alexander Wang, Jeremy Scoot, Diane Von Furstenberg, Narciso Rodriguez, Nina Ricci, y hace una pequeña escala en Milán, adentrándose en la maison de la medusa, mostrando a una Donatella Versace única y muy, muy auténtica. Una de las mejores piezas del volumen 2, Donatella se sale, divierte y divierte, a la vez que emociona enseñando por primera vez el palacete que tenía Gianni Versace en Milán, auténtico oasis donde el diseñador trabajaba y se inspiraba.
Loic Prigent hace que no te muevas del sofá, te guste la moda, o simplemente seas un amateur en la materia, consigue un ritmo dinámico, entretenido… y lo mejor, muy bien documentado. Viendo las piezas descubres, conoces al personaje con intensidad, al diseñador, su trayectoria, su historia… y durante esas horas previas a todo su entorno que está ayudándolo, y trabajando en uno de los momentos decisivos de su carrera. Sorprende la humanidad de los retratados, como el retrato no mitifica al creador, si no todo lo contrario, los acerca, los hace accesibles al que visiona el documental.
El documental de moda está teniendo un pequeño auge, por supuesto y lamentablemente, fuera de nuestras fronteras. Canales como Arte y Sundance, están apoyando este tipo de producto y en nuestro país, todavía estamos esperando a qué nazca un programa que trate contenidos culturales en torno a la moda, al diseño, a la fotografía,  a la creación en todas sus vertientes. Es triste como el medio audiovisual patrio enfoca la moda, siempre ligada a programas del corazón y tratada como un “gossip” más. Señores de la televisión, copien en modelo, ampliemos las ventanas de información en la caja tonta aunque sea -como siempre- a horas imperdonables, no vamos a exigir el Prime time.